RECETA DE BIZCOCHOS DE GALLETA

Hoy te traemos una receta de bizcochos de galleta que te hará la boca aguas desde el primer bocado.

Este postre es ideal para cualquier ocasión especial o para disfrutar en casa con la familia.

La base de estos bizcochos está hecha con galletas trituradas, que le dan una textura crujiente y deliciosa.

Encima, un bizcocho esponjoso con trozos de galleta añade un toque suave y húmedo, creando una combinación perfecta de texturas.

Y para darle el toque final, lo decoramos con chocolate suave y frambuesas frescas, que aportan un contraste de sabores increíble.

Si estás buscando una receta de bizcochos de galleta que sea fácil de hacer pero que se vea y sepa espectacular, esta es ideal para ti.

Además, puedes personalizarla con tus ingredientes favoritos o cambiar las frambuesas por otras frutas si lo prefieres.

Esta receta de bizcochos de galleta no solo es deliciosa, sino también muy versátil.

Anímate a prepararla y sorprende a todos con un postre que se convertirá en un clásico en tu cocina.

INGREDIENTES DE LA RECETA

Para la base de galleta:

• 200 g de galletas Digestive o galletas Maria
• 100 g de mantequilla derretida
• 2 cucharadas de azúcar (opcional)

El bizcocho esponjoso:

• 3 huevos
• 150 g de azúcar
• 150 g de harina
• 1 cucharadita de levadura en polvo
• 1 pizca de sal
• 50 ml de leche
• 50 ml de aceite o mantequilla derretida
• 100 g de galletas trituradas (pueden ser las mismas que para la base)

Para la decoración:

• 100 g de chocolate negro o con leche (según tu preferencia)
• Azúcar glas (al gusto)
• Frambuesas frescas (para decorar)

PREPARACIÓN DE LA RECETA DE BIZCOCHOS DE GALLETA

Tritura las galletas en un procesador de alimentos o metiéndolas en una bolsa de plástico y dándoles golpes con un rodillo hasta que queden en migas finas.

Derrite la mantequilla en el microondas o a fuego bajo y mézclala con las galletas trituradas. Si quieres darle un toque más dulce, puedes agregar un par de cucharadas de azúcar.

Coloca esta mezcla en el fondo de un molde rectangular (puede ser de unos 20×20 cm o similar) presionando bien para que quede compacta. Mételo en la nevera para que se enfríe mientras preparas el bizcocho.

Precalienta el horno a 180°C (350°F).

En un bol, bate los huevos con el azúcar hasta que la mezcla esté espumosa y haya aumentado de volumen.

Agrega la leche, el aceite (o mantequilla derretida) y mezcla bien.

Tamiza la harina junto con la levadura y la pizca de sal e intégralo a la mezcla de huevos, batiendo suavemente para no perder el aire.

Añade las galletas trituradas a la mezcla del bizcocho y revuelve para que se distribuyan bien.

Vierte la mezcla sobre la base de galleta que tenías reservada y hornea durante unos 25-30 minutos o hasta que al insertar un palillo, este salga limpio.

Deja enfriar completamente.

Una vez que el bizcocho esté completamente frio, derrite el chocolate al baño maría o en el microondas (en intervalos de 20 segundos, removiendo cada vez).

Cubre el bizcocho con el chocolate derretido de manera uniforme.

Espolvorea azúcar glas por encima al gusto.

Decora con frambuesas frescas justo antes de servir.

Cuando todo esté bien montado y decorado, corta en cuadraditos y disfruta.

Seguro que te quedan riquísimos. Puedes añadir más decoraciones como frutos secos o un poco de menta para darles un toque fresco.

💡 Consejos útiles para que tus bizcochos de galleta salgan de diez

Compacta bien la base de galleta antes de añadir el bizcocho. Si queda suelta, al cortar puede desmoronarse. Ayúdate con el dorso de una cuchara o un vaso.

No sobrebatas la mezcla del bizcocho una vez añadas la harina. Hazlo con movimientos envolventes para no perder el aire incorporado y que quede bien esponjoso.

Las galletas trituradas del bizcocho aportan textura, pero si prefieres una miga más uniforme, puedes tamizarlas ligeramente antes de añadirlas.

Controla el horno a partir de los 25 minutos. Cada horno es un mundo, así que si ves que empieza a dorarse por arriba pero aún está crudo por dentro, cúbrelo con papel de aluminio y deja que termine de hacerse.

Deja enfriar bien antes de añadir el chocolate. Si lo viertes caliente sobre el bizcocho aún tibio, se derretirá y absorberá en lugar de formar una capa lisa.

🍰 Variantes sabrosas para darle un giro a la receta

• Sabor cítrico: añade ralladura de naranja o limón a la masa del bizcocho para un toque fresco y aromático.

• Versión con café: moja ligeramente la base de galletas con café antes de hornear. Combina genial con el chocolate y le da un aire tipo tiramisú.

• Toque crujiente: incorpora trocitos de nueces, almendras o avellanas a la masa del bizcocho o espolvorea por encima del chocolate antes de que se endurezca.

• Bizcochos individuales: hornea la mezcla en moldes de magdalenas o mini tartaletas. Tendrás porciones perfectas para servir en reuniones o como postre especial.

• Cobertura diferente: en lugar de chocolate, puedes cubrir con una ganache blanca, una mermelada espesa de frutos rojos o incluso una capa de crema de queso con azúcar glas.