Esta receta de menús con cero desperdicio y máximo sabor es perfecta para aquellos que buscan reducir su impacto ambiental y disfrutar de comidas deliciosas.

Cocinar con ingredientes que de otra manera se desecharían es una forma creativa de mostrar respeto por el medio ambiente y la alimentación.

La idea detrás de esta receta es utilizar todos los ingredientes disponibles sin desperdiciar nada, logrando así una comida nutritiva y sabrosa.

Un aspecto clave de esta receta es la flexibilidad, ya que puedes adaptarla según los ingredientes que tengas a mano.

INGREDIENTES

• Restos de verduras como zanahorias, cebolla y apio
• 1 taza de garbanzos cocidos
• 1 cucharadita de comino
• 1 cucharadita de pimentón
• Salsa de tomate casera o comprada

PREPARACIÓN

Pica las verduras restantes en trozos pequeños y sofríelas en una sartén con un poco de aceite de oliva.

Agrega los garbanzos cocidos, el comino y el pimentón, y revuelve bien para combinar.

Incorpora la salsa de tomate y cocina a fuego lento durante unos 20 minutos, o hasta que la mezcla esté caliente y los sabores se hayan fusionado.

Prueba y ajusta la sal y la pimienta según sea necesario.

Sirve caliente, acompañado de pan o arroz, y disfruta de esta comida sostenible y nutritiva.

La clave para que esta receta tenga éxito es la creatividad y la disposición a experimentar con diferentes ingredientes y combinaciones de sabores.

Puedes personalizar esta receta según tus gustos y preferencias, agregando o sustituyendo ingredientes para hacerla aún más deliciosa.

Esta receta no solo es beneficiosa para el medio ambiente, sino que también es una excelente forma de reducir costos y aprovechar al máximo los ingredientes que tienes en casa.

Al final, lo más importante es disfrutar del proceso de cocinar y compartir comidas deliciosas con los demás, mientras se cuida el planeta.