CÓMO HACER RABAS MUY CRUJIENTES
Si te encanta el sabor del mar y buscas un aperitivo clásico, esta receta es para ti. Hoy te enseñaré cómo hacer rabas muy crujientes, al estilo tradicional del norte, perfectas para compartir con una buena caña o un vino fresco.
Las rabas son una tapa sencilla pero deliciosa, ideales para acompañar con una cerveza o un vino.
El secreto para que salgan perfectas está en la frescura del calamar, un buen rebozado y la fritura justa.
Con esta receta, descubrirás cómo hacer rabas muy crujientes por fuera y tiernas por dentro, sin complicaciones y con ingredientes básicos.
Además, te daré algunos trucos para que las tiras de calamar no queden gomosas y consigas ese toque dorado y sabroso que tanto gusta.
Verás cómo hacer rabas muy crujientes nunca fue tan fácil y rápido.
Sírvelas calientes con un poco de limón y disfruta de este clásico de la gastronomía española en casa.
Una tapa sencilla, deliciosa y con todo el sabor del norte.
INGREDIENTES DE LA RECETA
(para 4 personas):
- 500 g de calamar limpio (tubos y/o tentáculos)
- 100 g de harina de trigo (puedes mezclar con harina de garbanzo para más crujiente)
- 1 huevo (opcional, para un rebozado más grueso)
- Sal al gusto
- Limón (para servir)
- Aceite de oliva suave o aceite de girasol (para freír)
Opcionales:
- Una pizca de pimentón dulce o picante
- Ajo en polvo o perejil seco para aromatizar
CÓMO HACER LA RECETA DE RABAS MUY CRUJIENTES
Si los calamares no está limpio, retira piel, vísceras y la pluma.
Corta el cuerpo del calamar en tiras finas (aprox. 1 cm de grosor y unos 5-7 cm de largo). Los tentáculos se pueden usar enteros o partidos en trozos más pequeños.
Sécalos bien con papel absorbente.
Coloca las tiras en un bol y añade sal al gusto.
Puedes espolvorear un poco de ajo en polvo o pimentón si quieres darles un toque especial.
Pasa las tiras por harina, asegurándote de que queden bien cubiertas.
Si prefieres un rebozado más gordito, pásalas primero por huevo batido y luego por harina.
Sacude el exceso de harina para evitar grumos.
Calienta abundante aceite en una sartén o freidora a 180ºC.
Fríe las rabas en pequeñas tandas durante 1-2 minutos, hasta que estén doradas y crujientes.
Sácalas y ponlas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Sírvelas calientes, acompañadas de gajos de limón para exprimir por encima.
✅ Consejos para unas rabas realmente crujientes
Seca bien el calamar: es clave para que la harina se adhiera bien y no salpique al freír. Usa papel absorbente con generosidad.
Harina ideal: mezcla mitad de harina de trigo y mitad de harina de garbanzo o arroz para un extra de crujiente.
Aceite bien caliente: asegúrate de que el aceite esté a 180 °C antes de freír. Si está frío, las rabas absorberán más grasa.
Pocas en la sartén: fríe en tandas pequeñas para que la temperatura del aceite no baje y queden bien doradas.
No las tapes: tras freírlas, déjalas al aire en papel absorbente, sin tapar, para que no se reblandezcan con el vapor.
Recién hechas: sírvelas al momento. Las rabas pierden textura rápidamente al enfriarse.
🔄 Variantes para darles tu toque personal
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Con huevo o sin él: el huevo da un rebozado más grueso, pero si prefieres algo más ligero y seco, ve solo con harina.
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Toque de especias: añade ajo en polvo, pimentón dulce o picante, o una pizca de curry a la harina para dar sabor extra.
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Rebozado a la andaluza: solo con harina y fritura rápida, para unas rabas muy finas y crujientes.
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Estilo tempura: mezcla la harina con agua muy fría y un poco de levadura para una versión más esponjosa.
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Con limón y alioli: acompaña con gajos de limón y una salsa suave de alioli o mayonesa con ajo y perejil.